La fotografía es de Rob. Está tomada de aquí. |
Hace muy pocos inviernos, buscando para mi hijo un poema sobre caballos, me encontré con este:
También mueren caballos en combate,
y lo hacen lentamente, pues reciben
flechazos imprecisos. Se desangran
con un noble y callado sufrimiento.
De sus ojos inmóviles se adueña
una distante y superior mirada,
y sus oídos sufren la agonía
furiosa y desmedida de los hombres.
y lo hacen lentamente, pues reciben
flechazos imprecisos. Se desangran
con un noble y callado sufrimiento.
De sus ojos inmóviles se adueña
una distante y superior mirada,
y sus oídos sufren la agonía
furiosa y desmedida de los hombres.
Lo llevé rondando en la cabeza muchos días, con una imagen de caballos galopando entre la niebla, algo así. Recordé vagamente el comienzo de una serie que yo creía de finales de los ochenta, pero no recordaba su título. Hace poco encontré esas imágenes. Al volver a verlas, pensé que tal vez había deseado entonces leer un poema que ya estaba escrito aunque yo no lo supiese.
12 comentarios:
Qué belleza, Olga. Lo es mucho más cuando nos la ofreces envuelta en tu mirada, tu recuerdo y tus palabras.
Gracias.
Gracias a ti, Durrell, como siempre, por hacer que parezca que importa.
Muchas gracias Olga por tu comentario. Me alaga mucho que te haya gustado mi fotografía para ilustrar un post en tu blog.
Mis fotografias las publico con licencia Creative Commons, y no hay problema alguna para usarlas si no se transforman, si se menciona mi nombre como autor y no hay ánimo de lucro. Te agradezco mucho el comentario en mi blog porque además, he podido conocer tu página, que me parece muy nteresante.
Un saludo.
Busqué "caballos en la niebla" y los tuyos fueron los que más se acercaban a la imagen que me había quedado del poema. Desde el principio los imaginé en la niebla y ahora, con el tiempo, (que es otra especie de niebla) se han quedado definitivamente así en mi memoria.
No había ninguna dirección para poder pedir permiso, así que utilicé lo que encontré;-)
Me parece una foto muy bonita.
Gracias por dejármela y bienvenido.
Me había quedado atrás, querida Olga.Pero ya me he puesto al día de todas las entradas y sus comentarios. Oh!
¡Pues gracias!
Me gusta mucho escribir estas entradas.
Oye, vuelve a mandarme tu móvil, que no encuentro la hoja donde lo apunté y, si no, no podremos tomar un café cuando vaya a Sevilla (sorry).
Dámelo en otro comentario y no te lo publicaré.
Los sufridos y valientes caballos.
Salu2, OLGA.
Quizá la nobleza sea inversamente proporcional al ruido que hace nuestro dolor. No lo sé.
En cualquier caso, el poema es perfecto.
Salu2, mesié.
El primer poema que aprendí de memoria. Gracias por traerlo aquí.
Un abrazo.
También fue el primero que se aprendió mi hijo (dejando aparte rimas escolares). No sé si hago bien; luego, la mitad de las cosas que lee le parecen tonterías. Claro;-)
Busca la misma sensación, y no es fácil.
Un fuerte abrazo.
que lindo eso!
espero que entres a mi blog! y me des tu opinion!
Gracias, Vale. Bienvenida.
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